Cómo hacer un semillero “de cama caliente”: ¡lo que las semillas necesitan en invierno!

Semillero de cama caliente

En los fríos meses del invierno parece que hay poco que hacer en el huerto, y más aún si se trata de una mini huerta casera de un metro cuadrado. Sin embargo en este post te enseñamos cómo hacer un semillero “de cama caliente”, ideal para la temporada fría.

Varios lectores de nuestro libro nos han comentado que están deseando ponerse manos a la obra y empezar a cultivar, lo cual nos llena de satisfacción. En este post os proponemos una tarea sencilla a la par que útil: hacer un semillero de invierno.

Materiales para hacer una semillero invernal

– Una caja de madera (o de plástico) de unos 20 centímetros de altura.
– Paleta (de este tipo).
– Guante (de látex y algodón, o de cuero).
– Estiércol de caballo (como éste).
– Arena de río.
– Sustrato (por ejemplo éste).
– Semillas de guisantes (nosotros hemos utilizado semillas de guisantes enanos).
– Pulverizador (tipo así).
– Metacrilato, cristal o plástico.

Cuando siembras semillas, estas solo necesitan humedad y calor para desarrollarse, ya que el “alimento” y su potencialidad para germinar y crecer están en su interior.

La parte esencial y diferencial de este semillero es el estiércol, que proporcionará calor a las semillas cuando fermente, lo cual ayudará a que las semillas germinen y, a su vez, las protegerá del frío.

Semillero para invierno

Semillero de cama caliente paso a paso

1. Pon las semillas en remojo el día anterior.

2. Coge el recipiente y coloca una primera capa de estiércol en la base. Usa guantes, sobre todo en este paso en el que manipulas estiércol.

3. Mezcla dos partes de sustrato por una de arena de río. Tamízalo. Después, echa el resultado sobre el estiércol y alísalo.

4. Una vez escurridas las semillas, colócalas y húndelas un centímetro aproximadamente con el dedo.

5. Cubre las semillas con una capa fina de 50% de arena y 50% de sustrato.

6. Riega con el pulverizador (lo utilizamos en vez de una regadera para que el chorro de agua no mueva las simientes de su sitio).

7. Cubre con metacrilato, cristal o plástico.

8. Asegúrate que las semillas siempre estén húmedas ¡pero no mojadas ni encharcadas! Usa el pulverizador para ello. De hecho, en este caso el recipiente no necesita tener agujeros de drenaje porque nunca se debe mojar mucho la tierra.

En este otro post, puedes ver más trucos para optimizar la siembra.

¡Ya tienes tu semillero invernal! Ponlo en práctica y alucina con sus resultados.

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